Descubriendo su Esencia y Precio: Todo lo que Necesitas Saber

El interruptor general automático o IGA constituye un elemento esencial del cuadro general de control y protección. Se trata de un mecanismo de seguridad capaz de interrumpir el suministro ante eventuales sobrecargas o cortocircuitos. A continuación, te explicamos la función del IGA, su localización y el procedimiento para rearmarlo.

¿Qué es el Interruptor General Automático o IGA?

El interruptor general automático, también denominado IGA, es uno de los componentes fundamentales que conforman el cuadro eléctrico de una vivienda. Este posee la capacidad de interrumpir el flujo eléctrico cuando hay riesgo de sobrecarga o cortocircuito en una propiedad o local.

Siempre que se exceda la potencia máxima permitida por la instalación eléctrica, el IGA detendrá el suministro de energía. Según lo establecido en el Real Decreto 842/2002, el interruptor general automático debe tener la facultad de cortar el suministro cuando ocurran sobrecargas o cortocircuitos con una intensidad mínima de 4.500 amperios (A).

El IGA es un componente de carácter obligatorio en el sistema eléctrico, ya que es el único dispositivo capaz de prevenir que se supere la potencia que puede tolerar la instalación. Es importante resaltar que el IGA es irremplazable, sin importar el dispositivo de control utilizado para la potencia.

Por razones de seguridad, se aconseja a los usuarios desconectar este interruptor al realizar reparaciones en cualquier componente de la instalación eléctrica.

¿Dónde se encuentra el IGA en el cuadro eléctrico?

El interruptor general automático comenzó a integrarse en los cuadros eléctricos tras su estandarización en 2002. Generalmente, se halla ubicado junto al interruptor de Protección Contra Sobretensiones (PCT).

Hoy en día, además del interruptor general automático, los cuadros eléctricos deben contar obligatoriamente con los siguientes elementos:

• Interruptor diferencial general (ID): este dispositivo tiene la capacidad de detectar fugas de corriente cuando hay un aparato defectuoso o alguna irregularidad en la instalación.
• Pequeños Interruptores Automáticos (PIAs): protegen contra el exceso de potencia a los circuitos internos donde se divide una instalación y sus dispositivos eléctricos (alumbrado, enchufes, horno, calefacción, entre otros).
• Protección Contra Sobretensiones (PCS): protege los aparatos eléctricos en caso de sufrir una sobrecarga de tensión desviando la corriente.

Además, existe otro interruptor obligatorio en la instalación eléctrica, que puede estar ubicado dentro del cuadro eléctrico o en el contador de luz: el interruptor de control de potencia (ICP). La función del ICP es interrumpir el suministro si se excede la capacidad eléctrica contratada en la edificación.

¿Cuál es la diferencia entre IGA e ICP?

Aunque ambos son interruptores omnipolares (con la facultad de cortar el suministro de luz en toda la vivienda), se trata de dos elementos con funciones distintas en la instalación:

• El IGA corta el suministro cuando la potencia solicitada por el cliente es superior a la que

  puede soportar la instalación eléctrica, protegiendo así la residencia de cortocircuitos y sobrecargas.

• El ICP, por su parte, tiene la capacidad de interrumpir el suministro cuando el cliente excede la potencia contratada.

Ambos componentes son indispensables e independientes entre sí en la instalación eléctrica, siendo insustituibles.

¿Qué IGA colocar en una vivienda?

En una residencia doméstica se deberá instalar un interruptor general automático con una intensidad mínima de 25 amperios (A). También será esencial prestar atención al tipo de instalación eléctrica, dado que esto influye en la apariencia del IGA. El usuario podrá encontrarse con las siguientes situaciones:

Instalaciones monofásicas

Características de los puntos de suministro doméstico. El IGA en este caso está compuesto de dos palancas. Este sistema tiene una sola fase, lo que implica que todos los dispositivos eléctricos están conectados a un único circuito y, por ende, la potencia contratada está disponible para todo ese circuito.

Instalaciones trifásicas

Son habituales en empresas o industrias. En esta circunstancia, el IGA está formado por tres palancas. El sistema trifásico cuenta con tres fases y tres corrientes alternas, lo que significa que la instalación eléctrica se reparte en tres partes que alimentan diversas secciones de la vivienda. A diferencia de la monofásica, la potencia eléctrica está dividida en tres partes iguales.

Una vez mencionadas las distintas configuraciones que puede tener un IGA dependiendo del tipo de instalación, es importante resaltar que este interruptor general automático se ubica por defecto en el cuadro de electricidad (denominado cuadro general de mando y protección). No obstante, en caso de necesitar reemplazarlo, se pueden hallar diversos modelos y precios. Para evitar accidentes, es aconsejable contactar a un profesional cuando se requiera realizar alguna modificación dentro del cuadro eléctrico.

El costo del IGA dependerá de sus características y marca. A continuación, mostramos una tabla de precios para conocer el coste aproximado de este interruptor:

¿Por qué se dispara el IGA y cómo solucionarlo?

El IGA interrumpirá el suministro eléctrico cuando se sobrepase la potencia máxima tolerada por la instalación (detallada en el Boletín Eléctrico) o haya un incremento de tensión que pueda comprometer la instalación eléctrica. Para restablecer la luz si se dispara el interruptor, simplemente se deberá levantar la palanca del IGA.

Lo más aconsejable para evitar que el IGA corte el suministro es no tener demasiados electrodomésticos operando simultáneamente.

Además, existe la posibilidad de que el corte de luz se deba a un inconveniente en la red de distribución o en la propia instalación. ¿Qué pasos se deben seguir en cada caso?

• Avería en la red de distribución: el usuario deberá contactar con la compañía distribuidora eléctrica en la zona donde se localiza la vivienda. Durante la llamada, la distribuidora solicitará los datos identificativos del

  cliente y se esforzará por identificar la causa de la falla para repararla.

• Falla en la instalación: en este caso, las personas involucradas deberán acudir al servicio de mantenimiento que hayan contratado. Si no se cuenta con dicho servicio, será imperativo contactar a un instalador acreditado o experto.